Las siete maravillas del mundo eran construcciones consideradas en la antigüedad greco-romana como monumentos a la creación e ingenio humano.
A lo largo de la historia se ha intentado repetidamente actualizar la lista de las siete maravillas del mundo para reemplazar las construcciones ya destruidas, para actualizarla con proezas posteriores o para incluir a otras civilizaciones. En el mismo sentido, se han propusesto múltiples listas de siete maravillas, tales como las siete Maravillas del mundo Antiguo, las siete Maravillas del Mundo Moderno y las siete Maravillas de la Naturaleza.
Muchas
de las antiguas Siete Maravillas del mundo son aquellas que inspiraron y
asombraron a los grandes viajeros de todos los tiempos aun que ya no están más,
han desaparecido.
Pero
el mundo sigue girando y nuevas construcciones se van gestando. Las que
sobreviven y las nuevas, las más tecnológicas y las más antiguas... todas
forman parte de una increíble encuesta que la Fundación de las Nuevas Siete
Maravillas ha impulsado alrededor del mundo para elegir a las Siete Maravillas
del mundo moderno.
Hacia
el siglo V a.C., el gran viajero Heródoto
considerado el padre de la historia occidental, consideró posible compendiar en
una lista todas las obras monumentales que plasmaban lo mejor de la humanidad.
El padre de la Historia deseaba crear un mapa de la identidad de la raza
humana: un fiel y real registro de lo más representativo del hombre ante sí
mismo.
Su
idea se concretó recién tres siglos después, con Filón de Bizancio. Filón,
hombre trotamundos que vivió entre 290 y 220 a.C. decidió exponer sus recuerdos
de viaje en un diario, donde estableció las maravillas más notables de todas
las que había encontrado y conocido en sus viajes. Así es como este viajero y
escritor eligió reducir el número a siete, por considerarlo un número mágico y
de buen augurio. Las ubicó entre Medio Oriente y el Egeo porque "el
mundo" (en occidente) entonces se reducía a la cuenca mediterránea,
Mesopotamia, Egipto y poco más.
Los
latinos se encargaron de recoger su historia en un texto que llamaron "De
septem orbis miraculis". Justamente, el volumen original fue destruido en
el incendio de la maravillosa Biblioteca de Alejandría, una de las tantas
maravillas que quedó afuera de esa primera selección... Pero parece ser que la
historia esta vez dará revancha.
Del
texto de Filón, y de allí a la eternidad, es como hemos crecido con la historia
de las Siete Maravillas del mundo; cada una en un lugar diferente, con su
historia y arquitectura; pero en realidad sólo una de esas siete en la actualidad
se mantiene en pie: las Pirámides de Gizeh, en Egipto
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